TODO INCLUIDO EN LA PENÍNSULA, BALEARES Y CANARIAS
Sol, playa y una gastronomía espectacular
España es un destino turístico de primer orden a nivel internacional. En 2019, último año antes del estallido de la pandemia de Covid, 83 millones de personas visitaron España, posicionándose como el segundo país en el mundo que mayores turistas recibió. El país es mundialmente conocido por su rica cultura, comida deliciosa, hermosas playas y ciudades vibrantes. El buen clima y la calidad de su infraestructura hotelera han ayudado a que España siga siendo actualmente un destino de excelencia turística. Otro factor importante que cada año suma más adeptos es el turismo gastronómico, y aquí no solo incluimos a quien viene a deleitarse con los placeres de las tapas y paellas, sino a un turista cada vez más activo que llega en busca de experiencias gastronómicas reales.
Sus cientos de miles de kilómetros de costas colocan al turismo de sol y playa como uno de los principales motivos por el cual millones de visitantes llegan cada año a hermosos paraísos tales como Menorca, Formentera, Ibiza o las salvajes y lejanas islas Canarias.
La modalidad de alojamiento con todo incluido ha ido creciendo en los últimos años, favorecida por un tipo de cliente que busca agilidad en todo el proceso de planificación de sus vacaciones
El hecho de no tener que estar pendiente de detalles adicionales pudiendo disfrutar de comidas, bebidas, shows, actividades y excursiones haciendo una única reserva, simplifica ágilmente una gestión importante como es la de pensar nuestras futuras vacaciones.
Este tipo de alojamiento lo encontramos prácticamente en toda la línea de costas, destacando mayormente la Isla de Mallorca, Ibiza y las islas Canarias. En menor medida, encontramos hoteles todo incluido en la Costa Brava, Costa Dorada y la Costa del Sol en Andalucía.